Función y beneficios de la salsa de tomate
¿Qué función cumple la salsa de tomate?
La salsa de tomate es un condimento muy utilizado en la gastronomía de diferentes culturas alrededor del mundo. Además de su delicioso sabor, esta salsa cumple diversas funciones en nuestro organismo que benefician nuestra salud. A continuación, exploraremos algunos de los beneficios que aporta la salsa de tomate a nuestro cuerpo.
Protege la piel contra los rayos UV
El tomate es rico en licopeno, un antioxidante que protege nuestra piel contra los dañinos rayos UV del sol. Consumir salsa de tomate regularmente puede ayudar a reducir el riesgo de quemaduras solares y otros daños en la piel causados por la exposición al sol.
Disminuye los niveles de colesterol y triglicéridos
La salsa de tomate contiene fibra y compuestos bioactivos que ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL (conocido como "colesterol malo") y triglicéridos en la sangre. Esto puede disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares como la aterosclerosis y los infartos.
Reduce la hipertensión al ser una hortaliza baja en sodio
El tomate es una hortaliza naturalmente baja en sodio, lo que lo convierte en un alimento ideal para las personas que necesitan controlar su presión arterial. La salsa de tomate puede ayudar a reducir la hipertensión y promover una buena salud cardiovascular.
Disuelve cálculos biliares
El consumo regular de salsa de tomate puede ayudar a disolver los cálculos biliares, que son depósitos endurecidos de bilis que pueden formarse en la vesícula biliar. El ácido cítrico presente en el tomate puede descomponer estos cálculos y facilitar su eliminación.
Ayuda a hacer bien la digestión
La salsa de tomate contiene enzimas y fibra que ayudan a mejorar la digestión. Estos componentes pueden estimular la producción de enzimas digestivas y promover un tránsito intestinal saludable. Además, la acidez natural del tomate puede ayudar a prevenir la acidez estomacal y aliviar la indigestión.
Receta de salsa de tomate
Ingredientes:
- 1 kg de tomates maduros
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Lava los tomates y córtalos en trozos pequeños. Pela y pica la cebolla y los ajos.
- En una olla grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla y los ajos. Cocina a fuego medio hasta que estén dorados.
- Agrega los tomates a la olla y cocina a fuego medio-bajo durante aproximadamente 30 minutos, removiendo ocasionalmente.
- Retira la olla del fuego y deja enfriar un poco. Luego, pasa la salsa por un colador o procesador de alimentos para obtener una consistencia suave y sin grumos.
- Vuelve a colocar la salsa en la olla y caliéntala a fuego bajo durante unos minutos más. Añade sal y pimienta al gusto.
- ¡Tu salsa de tomate casera está lista para disfrutar!
La salsa de tomate es un condimento versátil que puede ser utilizado en una amplia variedad de platos, desde pastas y pizzas hasta guisos y salsas para carne. Además de su delicioso sabor, esta salsa aporta beneficios para nuestra salud, promoviendo una piel sana, ayudando a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos, controlando la hipertensión, disolviendo cálculos biliares y mejorando la digestión.
Siempre es recomendable optar por salsas de tomate naturales, como las de la marca Naturas, que están hechas con tomates 100% naturales y no contienen aditivos ni conservantes artificiales. De esta manera, podemos disfrutar de todos los beneficios del tomate de forma práctica y saludable.
Gracias por leer hasta aquí y espero que hayas encontrado útil la información sobre la función de la salsa de tomate. Si tienes alguna pregunta o comentario, no dudes en dejarlo a continuación. Estaré encantado de responderlo. ¡Hasta pronto!
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