Cuándo poner la carne en la barbacoa: consejos imprescindibles

¿Cuándo sé que tengo que poner la carne en la barbacoa?

Uno de los debates más antiguos en el mundo de la barbacoa es si debemos salar la carne antes de llevarla al fuego o después, cuando la vamos a sacar a la mesa. Existen dos posturas principales en esta discusión y vamos a explorar ambas para tratar de llegar a una conclusión.

Salar después de llevarla al fuego

Los partidarios de salar la carne después de llevarla al fuego argumentan que al añadir sal a un alimento estamos favoreciendo que suelte sus jugos, lo que resulta en una carne más seca y dura. Al ponerla sobre un calor fuerte y sin sazonar, se formará una costra que sellará la carne y retendrá todos los jugos en su interior. Por lo tanto, lo ideal es salar la carne cuando esté en el plato lista para ir a la mesa.

Salar antes de llevarla al fuego

Por otro lado, existen quienes defienden salar la carne antes de llevarla al fuego. Estos argumentan que al poner una buena capa gruesa de sal gorda justo en el momento de llevarla al fuego, se creará una costra en la carne que no es necesario comer. La mayoría de la sal caerá al fuego y el resto se podrá retirar al momento de degustarla. Además, la carne habrá absorbido mejor la sal y tendrá un sabor más sabroso.

Objetivos de salar la carne

El objetivo de añadir sal a la carne es reforzar su sabor y ablandarla. Para lograr esto, la sal debe penetrar dentro de la fibra de la carne. Una corriente más moderna entre los parrilleros sugiere cubrir la carne con una capa de sal, guardarla en la nevera y dejarla el tiempo adecuado para que se sazone. El tiempo de sazonado dependerá del tamaño de la pieza que vamos a asar. Esta opción es considerada perfecta por muchos.

Por otro lado, existe una opción mixta en la que se coloca la carne en la parrilla sin salar, se sella y se da vuelta. En este momento es cuando se añade la sal sobre la parte cocinada. Luego se continúa cocinando hasta alcanzar el punto deseado, se retira y se termina de salar el lado que falta.

Otra opción es marinar las carnes, introducirlas en un adobo que le dará sal y sabor. En este caso, se salará antes de la cocción. La sal y los demás ingredientes del adobo penetrarán en la carne y le darán un extra de sabor. Esta opción permite utilizar especias, hierbas, ajo, cebolla y tu mejor aceite de oliva virgen extra (AOVE) para marinar la carne. Con este marinado, se obtendrá una carne con un sabor más complejo y delicioso.

En conclusión, salar la carne antes o después de llevarla al fuego es una elección personal. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas. Si se desea una carne jugosa y tierna, puede ser mejor salarla después de cocinarla. Si se busca un sabor más intenso, salarla antes de cocinarla puede ser la mejor opción. Lo importante es experimentar y encontrar la manera que más se adapte a nuestros gustos y preferencias.

Espero que esta información te haya sido útil y te haya ayudado a entender mejor cuándo es el momento adecuado para poner la carne en la barbacoa. Si tienes alguna pregunta o duda adicional, no dudes en dejar un comentario y con gusto te responderé lo antes posible. ¡Disfruta de tus próximas barbacoas!